A 5 años del apagón: persisten las fallas eléctricas en Venezuela

A 5 años del apagón: persisten las fallas eléctricas en Venezuela. El apagón que vivió Venezuela en marzo de 2019, parece algo superado solo en Caracas, donde las fallas eléctricas son menores. En aquel momento, el país pasó varios días seguidos sin luz y, desde entonces, la situación no ha mejorado.

Según un trabajo de EFE publicado en La Patilla, en otras regiones de Venezuela, los cortes e interrupciones pueden prolongarse hasta por 24 horas continuas. La realidad es similar a la que existía antes del apagón nacional. Los 23 estados del país registran fallos en el fluido de energía.

Estas van desde breves y reiteradas fluctuaciones hasta interrupciones indefinidas. Durante el tiempo que se prolongan, apagan también la telefonía, la conexión a internet, el bombeo de agua potable y otros servicios básicos.

La resistencia

A través de las redes sociales, los venezolanos reportan a diario que los apagones se repiten sin previo aviso. Mientras, desestiman las versiones del Gobierno, según las cuales se trata de sabotajes al sistema eléctrico, manejado íntegramente por el Estado.

Ningún estado de Venezuela ha sido tan golpeado por los apagones como Zulia. La otrora región petrolera lleva 15 años con fallos de luz, afectando la vida de su capital, Maracaibo. En la segunda ciudad más poblada del país, la temperatura máxima supera los 40 grados centígrados.

Resignado, el comerciante informal Hugo Méndez dice a EFE que se siente “un poco triste y desanimado”. La estatal Corpoelec quita la luz en su sector unas tres horas al día -unas veces en la mañana y otras en la noche-; tiempo en el que él y sus vecinos solo pueden “esperar a que llegue” nuevamente el servicio.

Daños en los electrodomésticos

“Aguantamos con los teléfonos hasta que se descarguen. Después recurrimos al bombillo recargable. Aquí nos afecta un poquito porque el que tiene negocio y no tiene planta deja de producir (…). Hay que ingeniárselas hasta que se solucione esto”, explica el hombre de 40 años, que vende comidas en un puesto ambulante.

También a oscuras, Davane Bravo indica que el fluido de energía estuvo más estable en los últimos meses. Pero desde febrero, los apagones les “han dado duro” en esta ciudad en la que viven dos millones de personas.

“No tengo nevera, no tengo nada de refrigeración, porque en un bajón (fluctuación eléctrica) se me quemó hace dos años el aire, la nevera y un televisor”; asegura la mujer de 50 años, que vive de vender “cosas recicladas“, como lazos para el cabello y vive con su madre, de 74 años.

La normalización

Solo en 2023, el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS) documentó 416 protestas por fallas de electricidad en todo el país. Es una situación de “emergencia” que la organización no gubernamental Provea pide “no seguir normalizando”.

En su informe anual, publicado en febrero, el OVCS remarcó que los reclamos por la intermitencia de la energía son recurrentes. “Vecinos, comerciantes y servidores públicos” denuncian a diario la “interrupción de sus actividades y el deterioro de equipos electrodomésticos”.

Según estimaciones extraoficiales, el país registra cerca de 200 cortes eléctricos por día, algunos muy breves. Esta situación se refleja en los perfiles de Corpoelec en las redes sociales, donde denuncian constantemente los apagones y piden soluciones expeditas. EFE

A 5 años del apagón: persisten las fallas eléctricas en Venezuela

Foto: Cortesía

Fuente: La Patilla