Comunidad B Venezuela trabaja para construir un sistema económico sostenible

Comunidad B Venezuela trabaja para construir un sistema económico sostenible. Las cinco empresas venezolanas B certificadas participaron del evento “Construyendo Economías Sostenibles”. Este es un espacio donde se evidenció que el triple impacto ya es una realidad en el país.

Según nota de IHC, se trata de las empresas Leather Heart, Grupo San José/Casa Franceschi, Impact Hub Caracas, Grupo Táctica y Proyectos MAF. El evento contó con participación de B Lab España y la Comunidad B Venezuela, líderes empresariales, sociedad civil y entusiastas.

Triple impacto empresarial

La actividad se llevó a cabo en las instalaciones del Impact Hub Caracas. Y contó con la participación de la invitada especial de B Lab Spain, la venezolana Valentina Demori; quien inspiró a los presentes con las oportunidades de cooperación entre España y Venezuela en materia de triple impacto empresarial.

Asimismo de inspiradora fue la historia de Casa Franceschi en voz de su presidente, Carlos Franceschi; quien habló de los desafíos durante su certificación en 2021 como la segunda Empresa B venezolana.

Con B de beneficios para todos

Si bien existe una creciente comunidad en Venezuela alrededor del tema del triple impacto, la sostenibilidad y la economía del bienestar; aún muchos se preguntan qué es una Empresa B y, particularmente, por qué se identifican con esta letra.

La explicación viene de la palabra inglesa benefits, que en español significa beneficios. Se refiere al hecho de que, en este tipo de empresas, el lucro deja de ser solo un fin. Y se convierte en un vehículo que produce impacto positivo para el planeta y las personas, generando beneficios para todos.

Mesas de trabajo

Es por ello que una importante parte del tiempo del evento transcurrió en una dinámica grupal de mesas de trabajo. Aquí, la audiencia compartió perspectivas sobre las cinco áreas del modelo de impacto de Empresas B. Es decir, clientes, comunidades, medio ambiente, gobernanza y colaboradores.

Todo ello de la mano de representantes de las Empresas B certificadas y la Comunidad B Venezuela; que al final de la jornada compartieron, en un panel, las conclusiones de cada mesa con todos los presentes.

Gestión hacia los consumidores

La reflexión comenzó por el área de clientes y evaluó la gestión que una empresa debe tener hacia sus consumidores; a través de la calidad de sus productos y servicios, el marketing ético, la privacidad y seguridad de los datos; y los canales para recibir feedback, entre otros.

Por su parte, la discusión sobre las comunidades permitió establecer el compromiso de la organización. Así como su impacto en las sociedades donde opera, contrata a sus empleados o proveedores, y se abastece. Esta área considera además temas como diversidad, equidad e inclusión.

Medio ambiente

La dimensión de medio ambiente ayudó a identificar cuáles son (o no) las prácticas ambientales de la empresa. Así como su impacto en el aire, el clima, el agua, la tierra y la biodiversidad. Esto incluye la incidencia directa de sus operaciones y de su cadena de suministros y canales de distribución.

En tanto el área de gobernanza analizó la misión de la organización, su compromiso social y ambiental, sus valores, ética y transparencia. Esta área permitió establecer la habilidad de las compañías para proteger legalmente su misión. Y la consideración formal de todos sus grupos de interés para la toma de decisiones a través de su estructura corporativa.

Comunidad B Venezuela trabaja para construir un sistema económico sostenible

Foto: Cortesía IHC

Fuente: Nota de prensa IHC