Otro de los residentes de las comunidades de Tucupita dijo que el agua del río no es potable. “Para el consumo humano la sacamos de los pozos profundos y luego la potabilizamos. Cada botellón tiene un costo de 10 bolívares”, dijo.
“La gran paradoja es que Tucupita, capital del estado Delta Amacuro, estando en la orilla oriental del caño Mánamo; uno de las dos mayores ramificaciones del delta del Orinoco que desemboca en el Atlántico, no tiene agua. Ese es el principal problema de la ciudad”, refirió Casanova.
“Allá en Macareito hay aproximadamente 20 neveras y 20 aires dañados por altibajos de la energía eléctrica”, afirmó Pulvet.
La mayor dificultad es la falta de tratamiento en el hospital Dr. Luis Razetti de Tucupita; el más importante dispensador de salud en Delta Amacuro.
En esta zona selvática, las enfermedades más comunes son fiebre, gastroenteritis, micosis, gripe, desnutrición y paludismo; siendo esta una patología no común en las zonas de Guayo. La mayoría afectada es de los indígenas waraos.
De acuerdo con voceros de los organismos de seguridad de la localidad, la mancha se produjo por una fuga que sufrió una de las válvulas; que fue detectado de manera inmediata por el personal de la petrolera. Aún continúan las labores de saneamiento en la zona.
