En este artículo vamos a repasar los conceptos clave relacionados con la marca personal o personal brand. Recordaremos qué es, por qué te puede ayudar a conseguir tus objetivos y te daremos los mejores consejos de marketing personal.
El marketing personal te puede ayudar tanto si quieres promocionar tu negocio, como si buscas colaboradores, inversores, o hacer nuevos contactos. Es decir, tener trabajada tu personal brand te va a permitir ir directo a tu objetivo sea el que sea, y no “dar tumbos” y funcionar por “ensayo-error”.
Marketing personal
¿Qué es la marca personal?
La marca personal es nuestra esencia, nuestra identidad. Hay quien la define como “la huella que dejamos en los demás” a partir de nuestras acciones personales y digitales.
En este sentido es muy importante la creación de contenido asociado a nuestra marca.
Algunos ejemplos de acciones para mejorar y gestionar nuestra marca personal podrían ser estos:
nuestra participación en eventos
creación de contenido
compartir conocimiento
explicar casos de éxito
dar tu opinión de experto/a
crear una comunidad
Se trata de “vender/venderte sin vender/venderte”.
¿Por qué crear tu marca personal te puede ayudar a alcanzar tu objetivo?
Trabajar tu marca personal y tener una estrategia de marketing personal te diferencia y te posiciona como experto/a. Esto es lo más importante y además implica todo esto:
Te conocerás mejor a ti mismo/a
El paso previo a cualquier acción de personal branding es el autoanálisis. Se trata de hacer una especie de DAFO para saber tus fortalezas/debilidades así como las oportunidades/amenazas del mercado y a partir de aquí ponerte a trabajar. Explotar tus fortalezas te llevará al éxito.
Te desarrollarás profesionalmente (y también a nivel personal)
Tu marca personal se basará en tus fortalezas, pero conocer tus debilidades te da la oportunidad de mejorarlas. El aprendizaje es constante. Saber que no quieres hacer, en lo que no te quieres meter… eso también es triunfar.
Te “venderás” mejor
Al fin y al cabo, el trabajo de la marca personal va asociado a determinados objetivos que generalmente son “vender” tu producto o servicio, tu negocio o incluso “venderte” como profesional. Tener bien definida tu estrategia de marca, aumentará tus ventas directa o indirectamente.
Aumentará tu alcance y networking.
“Las personas compran personas” más que productos o servicios, así que trabajar tu marca te permite “vender sin vender” porque será a través de tus acciones, del contenido que generes y compartas que la gente se interesará por ti. A más relaciones, más alcance y a más alcance, más beneficio.
Consejos para tu marketing personal:
1. Empieza por el autoanálisis:
Tienes que detectar las habilidades en las que destacas, aquello que te hace auténtico y te diferencia de los demás y “explotarlo”.
Parte de tus puntos fuertes (sin dejar de mejorar tus debilidades) y aprovéchalos.
¡Debes de ser tú mismo/a! Lo que vas a compartir es aquello que te hace ser tú, las experiencias que te dan identidad y valor. Aunque… si para inspirarte necesitas ver qué han hecho otras personas, también es una opción. No está mal que hagas un poco de estudio de mercado y te sirva la experiencia de otros/as, pero no imites, traza tu propio plan.
En esta línea más personal, incluye algunos valores en tu marca personal. Es decir, además de lo “esperado”, habla desde honestidad, el compromiso con el medio ambiente, la solidaridad, etc. Eso te hace más humano/a, no sólo un/a buen/a profesional.
2. Define tus objetivos y priorízalos.
¿Por qué estás trabajando tu marca personal? ¿Qué quieres conseguir?
Debes tener muy claros los objetivos a corto y medio plazo por lo menos, porque sólo así te centrarás en acciones orientadas a conseguirlos. Si no, desperdiciarás tu tiempo y energía innecesariamente.
Intenta que cada objetivo sea concreto y que pueda cuantificarse. Por ejemplo:
Quiero generar un 10% más de venta cada mes:
¿Cuántos nuevos contactos haré cada semana para conseguirlo?
¿Cuántas acciones haré proactivamente?
¿Cuántas promociones en redes sociales haré cada mes?
Quiero conseguir inversores o financiación:
¿Cuento con un buen CV con un diseño profesional y diferenciador?
¿Tengo mi cuenta de LinkedIn actualizada?
¿Puedo aportar un buen business plan?
3. Quién es tu público objetivo.
¿Tienes claro quién va a valorar tus acciones o el contenido que compartes? Sólo cuando tengas claro el “quién” podrás definir realmente el contenido porque tiene que ser algo que atrae a tu target o público objetivo.
4. Qué quieres comunicar y por qué quieres ser conocido.
Debes generar o compartir contenido de calidad y aunque debes “cumplir los mínimos” y tener el contenido básico de tu expertise, también debes intentar ser novedoso y algo transgresor porque la gente acaba cansándose de leer o percibir siempre lo mismo.
5. Define dónde quieres comunicar.
Hay infinidad de canales que puedes utilizar y querer controlarlos todos puede ser súper complicado y poco útil. Nuestro consejo es que, en función de tus objetivos y tu target, escojas los más adecuados para ti.
Puedes optar por apoyarte en un blog como punto de partida. Genera el contenido en tu blog y compártelo en las distintas plataformas que consideres oportunas: LinkedIn, Instagram, facebook, twitter, youtube, etc.
¡Pero cuidado! Valora si este punto tiene sentido para ti y para tus objetivos. No siempre vale lo de “café para todos”. Quizás tu objetivo no necesita de esto.
Por ejemplo:
Si estás pensando trabajar tu marca personal para vender servicios, posiblemente un blog sea una gran idea.
Pero si eres un personal trainer, mejor que te pongas las pilas con Instagram y YouTube.
Y si lo que quieres es atraer socios o clientes, quizás la mejor opción sea partir de LinkedIn.
A través de LinkedIn puedes potenciar tu marca personal gracias a la participación en foros, comentarios sobre algunas publicaciones, o incluso por asistir a eventos online.
Pero, sobre todo, Linkedin nos permite que mostremos la opinión de la gente que ha comprado nuestros productos, o de los que han trabajado con o para nosotros, y eso hoy en día vale oro, aprovéchalo.
La gente busca referencias, garantías, pruebas que respalden tu profesionalidad o experiencia. Y nada mejor que otras personas para apoyarte.
Consejo: Invierte algo de tiempo en escribir buenas recomendaciones en Linkedin para después poder conseguirlas.
6. Planifica tus acciones.
La constancia es muy importante y la forma de garantizarla es calendarizar las acciones o por lo menos tener clara la frecuencia que deben de tener y qué tiempo vas a dedicar a cada una de ellas. Deja espacio para la improvisación pero que no sea la base de tu estrategia 😉
7. Haz networking y crea comunidad.
Las sinergias con otros profesionales son vitales ¡y lo son para ambos! Está claro que vas a tener competencia, pero puede ser una rivalidad sana, también puedes establecer contacto con profesionales “afines” a ti, de forma que os complementéis… Seguramente cada uno tenga su tipo de público y, al final, “la unión hace la fuerza”, ¿no crees?
Por otro lado, otra forma de favorecer tu marca personal es crear comunidad y eventos online. Une, haz de nexo de gente que puede tener los mismos objetivos y que además pueden ser tus clientes.
¡Así que ofrece colaboraciones, encuentros y sé generoso/a!
8. Mide tus resultados.
Sea cuál sea la estrategia que elabores, tienes que ser capaz de analizar el alcance de la misma, ya sea en forma de tráfico hacia la web de tu negocio, a las tiendas digitales de Facebook, al tipo de interacciones en las redes o en la consecución de entrevistas de selección.
Si analizas los resultados podrás afinar tu estrategia y hacerla cada vez más rentable y productiva.
Conclusión:
A menudo nos referimos a la marca personal en nuestro ámbito laboral, pero no olvidemos que “somos lo que somos” en los diferentes aspectos de nuestra vida, así que no podemos desvincular “la marca que dejamos” en el terreno personal y en el laboral. Seguro que se entrelazan.
En nuestro ámbito personal podemos ser más espontáneos y naturales, en cambio en nuestro ámbito profesional, que va ligado a unos objetivos, debemos tener una estrategia si queremos crecer.
Y hagamos lo que hagamos, dejemos una buena huella.
FUENTE: Emprendices/Andrea/Pixabay