¿Por qué los humanos perdimos la cola? Las colas son una característica común en el reino animal. Están presentes en casi todas las clases de vertebrados. Y son utilizadas para una variedad de funciones, desde la defensa hasta la comunicación.
Sin embargo, los ancestros primates de los humanos, las perdieron del registro fósil hace aproximadamente entre 25 y 20 millones de años; marcando así uno de los cambios evolutivos más significativos en la genealogía humana.
Estas colas, alguna vez, fueron utilizadas para balancearse entre los árboles. Pero los investigadores debaten sobre las presiones evolutivas que pudieron haber llevado a su pérdida.
Aluy, un tipo de gen saltarín
Algunas teorías sugieren que pudo haber sido una adaptación al descender de los árboles o un requisito para la locomoción bípeda. No obstante, una reciente investigación publicada en la revista Nature, arroja luz sobre este misterio evolutivo. E identifica una mutación genética específica responsable de este cambio dramático, asegura el sitio National Geographic.
El estudio fue liderado por Bo Xia, del Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de Harvard. Al respecto, Xia se interesó en este tema tras sufrir una lesión en el coxis. Esto llevó a reflexionar sobre esta parte del cuerpo humano; y a investigar las diferencias genéticas entre los primates apenados, como nuestros ancestros humanos, y los monos con cola.
De hecho la investigación se centró en el elemento AluY, un tipo de «gen saltarín» capaz de moverse por el genoma. Cuando este elemento saltó dentro de un gen conocido como TBXT se cree que provocó la pérdida de la cola en los homínidos.
Elementos genéticos móviles
Y este gen es crucial para el desarrollo del notocordio embrionario, precursor de la columna vertebral. Por ello, el descubrimiento destaca la importancia de los elementos genéticos móviles, anteriormente considerados como ADN basura.
Pero también proporciona una explicación genética para la ausencia de colas en los humanos y sus parientes evolutivos cercanos.
Según la nota, el hallazgo fue validado mediante experimentos en ratones utilizando la tecnología de edición genética CRISPR; insertando los elementos Alu en el gen TBXT de embriones de ratón. Los ratones resultantes mostraron una reducción significativa en la longitud de la cola; sugiriendo que aunque el elemento AluY es un factor importante en la pérdida de la cola, podrían existir otras mutaciones que contribuyan a este rasgo distintivo de los primates, incluidos los humanos.
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¿Por qué los humanos perdimos la cola?
Foto: Cortesía
Fuente: National Geographic